La formación continua de los trabajadores no es una prioridad en las empresas españolas. Y eso que existen bonificaciones destinadas a tal efecto que reducen un 60% el coste de la inversión para las grandes compañías y llegan a cubrir el 100% de la financiación en el caso de las pymes. Pese a todo, durante 2008, sólo el 12% de las empresas que tenían acceso a estos fondos impartieron cursos a sus empleados. El desconocimiento de las ayudas, la alta temporalidad y la falta de una cultura de preparación profesional continua son algunas de las claves del problema.
El Estado les concedió un total de 575,2 millones de euros, pese a lo que las compañías tan sólo invirtieron el 68% del montante recibido. Sin ser grandes datos, lejos quedan estas cifras de los 318 millones de euros repartidos en 2005, cuando sólo 60.165 empresas se beneficiaron del fondo. Desde entonces, la difusión de esta posibilidad ha incrementado progresivamente el número de interesados.
Las pequeñas empresas, sin embargo, siguen lastrando el resultado. Mientras que el 81% de las grandes compañías ya aprovechan esta financiación, apenas y el 37% de las medianas (entre 10 y 249 empleados) y sólo el 8% de las pequeñas empresas se sirven de estos planes.
El número de cursos decrece en 2009.
Los expertos temen, además, que la crisis incida negativamente y que los cursos de formación sufran un retroceso durante este año. El hecho de que las empresas deban adelantar el dinero para recibirlo al cierre del ejercicio impedirá a aquellas compañías con problemas de tesorería afrontar el desembolso inicial.

A pesar de la crisis, y del mantra de las patronales sobre la necesidad de incrementar el capital humano para afrontarla, las empresas valencianas desaprovecharon el año pasado 15,6 millones de euros en cursos de formación, según datos de la Cámara de Comercio de Valencia. Y esa cantidad es sólo la punta del iceberg. Los 15,6 millones representan lo que dejaron de utilizar las mercantiles que sí participaron en los cursos (ejemplo: una empresa que tenía derecho a recibir actividades formativas por importe de 10.000 euros sólo utilizó 3.000). Y las sociedades participantes sólo representaron el 10% del conjunto de empresas de la comunidad autónoma con derecho a hacerlo, de modo que la cifra total no empleada (incalculable porque las condiciones varían según el caso) da vértigo.
España es el tercer país de la Unión Europea (UE), por detrás de Hungría y Portugal, con mayor porcentaje de adultos (un 46,6%) que no saben hablar ninguna lengua extranjera, según los datos publicados por la oficina estadística comunitaria, Eurostat.
La quinta Feria del Bachiller espera atraer a más de 25 mil estudiantes del último grado de la media vocacional, para que sepan que estudiar durante su paso a la universidad. Son 50 las instituciones universitarias que se hacen presentes con sus carreras tecnológicas, técnicas y universitarias para mostrar todo un abanico de posibilidades a los futuros
El Gobierno incrementa un 62,2% los fondos de formación continua gestionados por las comunidades autónomas